La tinta flexográfica, conocida por su abreviatura tinta flexo, es un tipo especializado de tinta que es indispensable en el proceso de impresión flexográfica. Este método de impresión, ampliamente utilizado en las industrias de embalaje, etiquetado e impresión comercial, depende de la tinta flexo para transferir imágenes y texto a varios soportes con precisión y calidad. La formulación de la tinta flexo es un proceso cuidadosamente elaborado. Incluye una combinación de ligantes, pigmentos, disolventes y aditivos, cada uno desempeñando un papel crucial. Los ligantes son responsables de mantener los pigmentos unidos y adherir la tinta al soporte. Se eligen diferentes ligantes según el tipo de soporte y las propiedades deseadas del filme de tinta impresa, como flexibilidad, durabilidad y resistencia a los químicos. Los pigmentos se seleccionan por su fuerza de color, estabilidad a la luz y capacidad de reproducir colores precisos. Dan a la tinta su apariencia visual y son cruciales para la identificación de marcas e información del producto en materiales impresos. Los disolventes en la tinta flexo controlan la viscosidad y las características de secado de la tinta. Las tintas flexo a base de disolventes han sido tradicionalmente utilizadas debido a su buen rendimiento en soportes no porosos y su naturaleza de secado rápido. Sin embargo, con el aumento de la conciencia ambiental, las tintas flexo a base de agua han ganado popularidad. Estas tintas usan agua como disolvente, reduciendo las emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV) y haciéndolas más amigables con el medio ambiente y adecuadas para aplicaciones donde se requiere seguridad y bajo olor. Se incorporan aditivos para optimizar el rendimiento de la tinta. Por ejemplo, los surfactantes se utilizan para reducir la tensión superficial, asegurando